LA CABRA COJA

Este cuento va dedicado a mi nieta Miriam cuando cumpla cuatro o cinco años-

Existe una aldea en un lugar no muy lejano que se llama Paradise , que está rodeado de montes , cruzado el centro de la Villa por un río de aguas cristalinas de color verde azulado , donde se puede ver con claridad a los pececillos surcar el fondo del cauce en bandadas , haciendo círculos , dando la sensación de que bailan llenos de paz y felicidad.

Era una aldea donde sus habitantes vivían y convivían con esa extraordinaria naturaleza y , mirando al horizonte y al limpio cielo, parecía dibujarse entre las transparentes nubes blancas y azules la mirada amable del creador.



Paradise , es una villa de cincuenta chozas con huerto y lugar para los animales , ya que los lugareños se dedicaban al cultivo de frutas y hortalizas y al pastoreo del ganado .

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Miriam, era una niña muy buena y muy simpática y asistía con los demás niños del pueblo al colegio, que era un cobertizo habilitado para estos menesteres, y la maestra era su mamá Isabel. Aprendía muchas cosas y siempre destacaba por sus continuas preguntas muy originales como “ ¿ Por qué en la tele se ve tantos hombres y mujeres tan malos? , ¿ Por qué el papá y tú decidisteis dejar nuestra casa tan bonita de la ciudad para veniros a Paradise? Tantas preguntas difíciles de explicar a una niña tan pequeña , que en definitiva era la encrucijada de explicarle que su padre, Ingeniero en una de las más grandes empresas del país, y ella, profesora en un centro público, tuvieron que abandonar esa forma de vida , que era envidiable para muchos pero era insostenible para ellos ,el verla crecer y desarrollarse en una sociedad autómata con falta de valores éticos y morales y en gran medida deshumanizada , que tenía apresada a los habitantes de las grandes urbes y esa era la causa de emigrar a la aldea , para que se desarrollara en el amor a la naturaleza , a los animalitos y sobre todo a sus semejantes-
CIUDAD DONDE VIVIA MIRIAM CON SUS PAPAS

Pero el papá de Miriam se dedicaba a las labores agrícolas y pastoreo del ganado ayudado por su fiel perro Lucero, que era muy amigo de Miriam, en realidad era uno más de la familia.



Entre las laderas de los montes que bordeaban Paradise , había una manada de lobos, que sabiamente lideraba Alkaiman , que no representaba ningún peligro para las ovejitas y demás ganado de la aldea , excepto uno de ellos cruel donde los haya llamado Sirkan , que era un lobo muy sanguinario y maligno . Alkaiman , por consejo de los lobos más ancianos del grupo, lo tuvo que desterrar. Sirkan atacaba a los rebaños e incluso a los pastores, que no tenían más remedio que ir armados con escopetas de caza para poder ahuyentarlo.


CAPITULO TERCERO
EL DESENLACE

Una mañana de primavera que no había cole, cuando apenas había despuntado el alba acompañó a su papá a pastorear el rebaño.
Amanecía un día claro con pocas nubes blancas azuladas que pasaban por encima de ellos dibujando todo tipo de figuras e incluso parecían sonreír.
Se dirigían por un sendero hacia una ladera del monte Vergel y Miriam, tan dicharachera como era, cantaba una marcha que se había inventado, que a las ovejitas les encantaban y la entonaba así:
¡Vamos por un sendero, laralarero!
¡Con mis ovejitas, laralarita!
¡Y estas muy contentas, laralareta!
¡ Bailan con salero , laralarero¡

Lucero movía al caminar sus patas lateralmente bailando esta marcha tan singular , que se repetía hasta llegar a la ladera donde el rebaño pacía plácidamente, bajo la mirada atenta de Pedro.






Miriam se entretenía cogiendo florecillas silvestres para llevárselas a su mamá, teniendo la mala fortuna de resbalar y quedar enganchada en las ramas de unos arbustos, quedando atrapada-

Sirkan el Maligno, que se encontraba al acecho, velozmente se dirigió hacia la niña con la clara intención de atacarla, percatándose de esta situación Florinda, una cabrita que pertenecía al rebaño, que precipitadamente llegó al lugar embistiendo a Sirkan que le hizo tambalearse, impidiendo que atacara a Miriam; pero no pudo evitar que el maligno lobo se abalanzara hacia él, mordiéndole ferozmente en la pata izquierda quebrándosela.

Pronto llegaron Pedro y Lucero que hicieron huir a Sirkan, atendiendo a Florinda , que la llevaron al veterinario de la aldea, que la curó pero no pudo evitar que quedara coja para siempre-
En la aldea, enterados de lo ocurrido, hicieron una fiesta en honor de Florinda y se lo condecoró con la medalla al valor más allá del cumplimiento del deber.

Y aquí acaba esta historia verídica, haciéndoos saber que, por encima de todo: riquezas , belleza etc., está el amor con mayúsculas hacia tus semejantes, animalitos y la naturaleza que, sin ella, no sería posible vivir con felicidad.





CINCO DE MARZO DE 2.009
Quien más te quiere: Tu abuelo